Esa carita que ves, es la de Shallam.
Shallam es un perro 10. Sí. Lo podemos decir con todas las letras. Cuando llegamos a gestionar el CPA de Parla, Shallam ya estaba allí, esperando su oportunidad, esa que aún no le había llegado.
No sabemos nada de su pasado, solo que tenía chip de Barcelona, así que eso nos dio pistas de que algún día tuvo una familia, o al menos alguien que le puso el microchip, ya que a quien te abandona sabiendo que lo que te espera después es un futuro incierto y sufrimiento no se le puede llamar familia.
A pesar de eso, Shallam nunca le ha guardado rencor al humano y le encanta pasar tiempo con la gente. Es un perro muy obediente, fiel, cariñoso, tranquilo y educado. Pasea genial de su correa y es muy sociable con otros perros. La mayoría de las veces él sale a su paseo a disfrutar precisamente de eso, de pasear tranquilamente con el humano, olisquear, descubrir cosas nuevas, observar… pero también le encanta una buena sesión de juegos con otros perros. Le chifla tumbarse al solete a disfrutar de una buena siesta. Shallam es un perro que sabe apreciar las cosas buenas de la vida.
A pesar de todas sus cualidades, no podemos olvidarnos que Shallam es un ser vivo, que siente y que se empapa de las experiencias vividas, como nos pasa a todos.
Él ha sufrido el abandono, el humano le ha dado la espalda en muchas ocasiones a pesar de haber demostrado que se adapta perfectamente a todas las circunstancias, y eso ha dejado una gran huella en su corazón. Tiene lo que algunos conocen como ansiedad por separación. ¿Cómo no la va a tener si tantas y tantas veces el que creyó que era su familia un día se fue y no volvió?
La "ansiedad por separación" en perros de perrera es muy común y afortunadamente tiene solución. Únicamente requiere de dos cosas, tiempo y compromiso.
Si tú dispones de esos dos requisitos ponte en contacto con nosotros, porque Shallam te va a devolver su agradecimiento en forma de amor incondicional perruno.